Lo de que sus profesores lo despreciaban, y al final triunfó, es algo que nos mola mucho a los fracasados escolares, sientes como se te hincha el pecho un poco pensando:"Va a ser que al final no soy tan tonto y todo". Frases como: "Tonto no es pero es que no se esfuerza" las empiezas a recordar como trofeos escolares, y todo gracias a tipos como Keith Moon, que juegan sin reglas, impredecibles y drogadictos, genios de la vida, anormales hasta el infinito.
Gracias señor Moon por todo. Lo de los who en realidad es lo de menos.
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